§ Efectivos del SEPRONA sospecharon
del vehículo con remolque y cargado de perros de caza.
§ Los cazadores habían dado
muerte a un jabalí y transportaban a dos crías vivas que posteriormente
fallecía una de ellas.
Durante la madrugada del pasado
15 de marzo, agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) de
la Guardia Civil de Chirivel, sorprenden
a tres cazadores furtivos que acababan de abatir un jabalí, con una jauría de
perros, y habían capturado sus dos crías.
Esta
actuación se enmarca en los servicios que a diario realiza la Guardia civil con
el objeto de prevenir y erradicar el ejercicio de la caza furtiva en nuestra
provincia, que los agentes llevan a cabo en diferentes lugares de interés
medioambiental y cinegético de la provincia.
Esta
actuación se inicia cuando los agentes, que se encontraban una zona de interés
cinegético en el término municipal de Los Vélez, observan unas linternas
encendidas en medio de la noche y escuchan gruñidos de un animal, observando al
acercarse como un jabalí yacía muerto en una zona próxima al camino por donde
transitan, probablemente por las mordidas de perros.
A
continuación, la Guardia Civil sin perder de vista el haz de luz de la
linternas y por los ladridos de los animales, localiza y da alcance a un
vehículo ocupado por tres personas y con el remolque lleno de perros de caza de
la raza Dogo de gran tamaño con restos de sangre en la boca.
Tras mantener
la conversación con los ocupantes, los agentes pueden observar como llevaban
restos de sangre fresca en los pantalones y en las manos comprobando además
como en el interior del vehículo llevaban las linternas y machetes manchados
con sangre, también fresca.
Durante
su entrevista, los cazadores acaban por explicar a los agentes que han dejado
al jabalí ya muerto, en el mismo lugar donde los habían encontrado los agentes
del SEPRONA, y habían capturado las dos crías, muriendo una de ellas en el
transcurso de su conversación, probablemente por las heridas provocadas.
Toda
esto ocurre en coto de caza privado y sin autorización, como pudieron comprobar
más tarde los Agentes del SEPRONA, por lo que les informan de su investigación
como presuntos autores de un delito relativo a la protección de la flora, fauna
y animales domésticos.
Además,
todas las actas por las infracciones observadas por los agentes de la Guardia
Civil, fueron remitidas a la Delegación Provincial de la Consejería de
Agricultura, Pesca y Medio Ambiente de la Junta de Andalucía.