lunes, 25 de febrero de 2013

El rector inaugura la XXII Semana Cultural del IES Albujaira dedicada a la frontera nazarí

Este instituto de Huércal Overa ha abordado en años anteriores semanas temáticas dedicadas a temas como la Transición o la biodiversidad y a personajes como Federico García Lorca
El rector, en la semana cultural del IES Albujaira
El rector, en la semana cultural del IES Albujaira


HUÉRCAL OVERA.- Pedro Molina ha participado esta mañana en la inauguración de la XXII Semana Cultural del IES Albujaira, dedicada este año a la frontera oriental nazarí. A lo largo de dos semanas, los alumnos de este instituto tienen la posibilidad de hacer excursiones y participar en conferencias sobre un tema que aborda esta edición cómo vivían los antiguos pobladores del territorio fronterizo comprendido entre Vélez Rubio, Vera y Huércal Overa a partir del siglo XIII, territorio que formó parte de la frontera oriental nazarí. Aquella realidad fronteriza fue también una zona de contacto entre dos mundos distintos pero con amplias influencias recíprocas. Un espacio que, como se les ha explicado hoy a los alumnos de este instituto, cobró en al-Andalus un significado más amplio que el de mero límite o confín: su guarda justificaba el dominio político de una dinastía que aspiraba a ejercer la hegemonía sobre todo el territorio nazarí y que soportó un desgarrador enfrentamiento bélico.

Este fenómeno fronterizo tuvo como telón de fondo dos culturas antagónicas en su origen que, tras una forzosa convivencia, dieron lugar a ciertos fenómenos de integración. La muestra cultural del IES Albujaira, que cuenta también con una exposición de trajes de época y de carteles explicativos sobre los restos arqueológicos hallados en la zona, trata de explicar cómo vivía de forma cotidiana la población que habitaba a un lado y otro de esa frontera imaginaria, los hombres –y mujeres- que protagonizaron aquella etapa de la historia donde la frontera militar se desdibujó, de hecho, en numerosas ocasiones para dejar fluir, de manera natural, relaciones e intercambios que se traducían en gestos de aceptación y transigencia entre los pobladores de esta frontera nazarí. Esas relaciones, como señalaba hoy el rector de la UAL, Pedro Molina, se aprecian en los documentos puramente históricos, pero también en los relatos de viaje y, por supuesto, en los de carácter literario.

Tras la inauguración, la profesora de Historia Medieval de la Universidad de Almería, Manuela García Pardo, ha impartido una conferencia en la que ha explicado a fondo cómo se desarrolló la vida en la frontera oriental nazarí. Ésta se formó en el siglo XIII, pero no fue hasta el siglo siguiente cuando sus habitantes comenzaron a vivir situaciones bélicas de especial tensión.

En esta tierra de frontera había dos grandes zonas: por una parte, la altiplanicie de Huéscar. Por otra, el territorio restante: Lorca en la parte cristiana y Vélez Rubio, Vera y Huércal Overa en la nazarí. Unas extensas tierras que se caracterizaron por dos hechos fundamentales: la fijeza de la línea de demarcación y la terrible inseguridad que padecieron sus habitantes, ya que tanto cristianos como musulmanes realizaban incursiones muy profundas en territorio contrario.

La frontera oriental nazarí fue la última frontera medieval y tuvo una vital importancia para el reino de Granada. Hoy, 800 años después, los alumnos del UES Albujaira, han conocido cómo fue la vida de sus ancestros.


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